Es momento de que nos pongamos a reflexionar y nos comprometamos con nuestros Institutos de Nivel Superior. Estamos en el momento justo de decir presente, para defender los derechos que los Institutos hemos adquirido legitimamente.
Perder la autonomía, dejaría tanto a los alumnos, docentes, como a todos los actores institucionales, sin la posibilidad de poder expresarse. Justamente un tema tan candente y actual como la libertad de expresión y de participación, se ponen en juego nuevamente. En este caso no son los medios de comunicación, es algo mucho más importante y de fondo: la educación. La cual nos incluye a todos y cada uno de los mendocinos.
Nuestros Institutos de Nivel Superior a través de sus Consejos Directivos, dan la posibilidad de expresión a todos los actores institucionales. Eliminarlos significaría, eliminar la voz de toda la comunida educativa. Por tal motivo consideramos fundamental, que luchemos, para que los Institutos no pierdan su autonomía y para que de esta manera, la voz de todos sea escuchada. Sino va a existir sólo una sola voz, que decida lo tuyo, lo mío y lo de los demás.
Perder la autonomía, dejaría tanto a los alumnos, docentes, como a todos los actores institucionales, sin la posibilidad de poder expresarse. Justamente un tema tan candente y actual como la libertad de expresión y de participación, se ponen en juego nuevamente. En este caso no son los medios de comunicación, es algo mucho más importante y de fondo: la educación. La cual nos incluye a todos y cada uno de los mendocinos.
Nuestros Institutos de Nivel Superior a través de sus Consejos Directivos, dan la posibilidad de expresión a todos los actores institucionales. Eliminarlos significaría, eliminar la voz de toda la comunida educativa. Por tal motivo consideramos fundamental, que luchemos, para que los Institutos no pierdan su autonomía y para que de esta manera, la voz de todos sea escuchada. Sino va a existir sólo una sola voz, que decida lo tuyo, lo mío y lo de los demás.